El comercio en general registra bajas en el consumo de productos y servicios.


Viento Negro
Las protestas a la administración aduanal mexicana no han funcionado para reducir los tiempos de espera de miles de personas que cruzan diariamente por la aduana de San Luis Rio Colorado.
Un reclamo generalizado en usuarios comunes, representantes de cámaras empresariales, así como el sector turístico y médico de la ciudad, no ha tenido ningún impacto en las autoridades aduanales en busca de mejorar y agilizar el cruce.
“Se ha tenido reuniones de partes de los organismos, cámaras, etc., se les ha comentado (al administrador de la aduana) la situación y la dinámica de una frontera, el alcalde también ya lo hizo”, lamentó el presidente del consejo de la Canaco, Leonardo Limón, tras señalar que, a pesar de los acercamientos, las revisiones siguen siendo extensas y lentas.
“Se entiende el tema de seguridad obviamente, pero la reducción de elementos o de dispositivos de verificación, ya sean arcos magnéticos o bandas, arruina la agilización del cruce”, sostuvo.
Añadió que el alcalde Iván Sandoval como primera autoridad en esta ciudad, ordenó que se colocaran oficiales de tránsito los días de más alto tráfico, viernes y sábado, para agilizar lo que como municipio se puede, al salir de la aduana.
“Urge que avance el tema de la aduana y en lo que camina se disponga de más personal, más equipos de tecnología, no se está en contra de la seguridad se está contra lo lento que es, y que también influye y mucho, el embudo que se forma de lado americano, con quienes también se ha platicado, con las autoridades municipales y federales, para que agilicen el cruce, pero tampoco hemos tenido resultados”.
Por su parte el presidente de Coparmex, José Enrique Carrasco, reprobó la falta de acciones en la aduana mexicana para corregir el problema de tiempos de espera en las filas.
“…hemos pedido acciones, siempre respetando las reglas que rigen la aduana, el sistema de semáforos, las plumas que no deben de levantarse, no estamos pidiendo que no hagan su trabajo”.
El líder empresarial dijo que sí había posibilidades de agilizar el flujo, como evitar las revisiones en el carril de cruce (donde se encuentra el semáforo y la pluma), y pasar los vehículos a segunda revisión; así como asegurar que estén operando los cuatro carriles.
“El alcalde ha estado en comunicación con el administrador, es un tema que le preocupa y lo mantiene en la agenda de trabajo, puesto que no solo afecta en los tiempos de la gente que cruza, sino que repercute en la economía de este lado de la frontera”, añadió Enrique Carrasco.
Sostuvo que tanto representantes de las cámaras empresariales como las autoridades municipales han estado pidiendo lo mismo, y que la respuesta del administrador de la aduana, en un inicio, la vieron propositiva.
“…pero ya después, creo que, un poquito más distante en el aspecto de decir, es lo que tenemos y la única solución que hay, es la ampliación. Nos dijo que no iba romper las reglas, que no iba levantar las plumas, que no iba apagar los semáforos, nosotros totalmente de acuerdo con eso, pero insistimos en otras acciones que podrían ayudar a agilizar las filas”.
Subrayó que el posicionamiento de las organizaciones empresariales, es que se agilice el cruce lo más que se pueda dentro de la normativa, y atendiendo las demandas de los comercios y de los propios usuarios que viven diariamente este proceso.